En la vida hay muchos instantes de perfección, o pocos, eso depende de cada uno. Afortunados aquellos que los encuentran en cualquier parte, en la música, en un libro, en la calle, en el campo, en la ciudad o en la conjunción de dos o más partes al mismo tiempo. Instantes en que debes parar lo que estés haciendo y limitarte a saborearlo ya sea escuchando una pieza de música, saborear que estás por fin descansando en tu cama o comiendo tu plato favorito. La sensación puede venir de varias formas, puede ser que sienta tus pelos pararse o simplemente sientes que se te escapa una sonrisa silenciosa.
Al escuchar In Rainbows por primera vez, encontré uno de esos instantes: En la canción Reckoner; minuto 2 segundo 49. En ese instante, para mí, la música de Radiohead alcanza la perfección.